Las Bahamas legalizará el cannabis medicinal
El Primer Ministro dio a conocer una serie de reformas que crearán una industria del cannabis medicinal.
Las tarjetas de pacientes cannabis medicinal de Estados Unidos serán reconocidas.
Se descriminalizará la posesión mínima y se eliminarán antecedentes penales.
Las Bahamas, destino que recibe a más de 900 mil turistas cada mes, legalizará el cultivo, producción y venta de cannabis bajo un modelo medicinal que involucrará a profesionales de la salud.
El 15 de julio de 2024, en una carta dirigida al Parlamento, el primer ministro de Las Bahamas, Philip Davis, describe cómo será el modelo de legalización y descriminalización de la planta, siguiendo una tendencia en la región con países como Jamaica, Trinidad y Tobago, Antigua y Barbuda y Barbados dando pasos en ese sentido.
La legalización del cannabis medicinal en Las Bahamas deberá cumplir el proceso legislativo para concretarse pero las autoridades han sido claras en cuáles son los objetivos que tienen con los cambios regulatorios.
Puntos clave de la legalización del cannabis medicinal en Las Bahamas
De acuerdo con la carta del Primer Ministro, la iniciativa es resultado de un proceso que comenzó en octubre de 2018 con una comisión gubernamental que desarrolló un informe entregado en 2021, así como una serie de debates e investigaciones.
Las recomendaciones de la comisión fueron “la legalización para uso médico, la despenalización para pequeñas cantidades, la legalización para el uso como sacramento religioso para miembros de la comunidad rastafari, así como regulaciones estrictas para garantizar la calidad y seguridad del producto local de cannabis”.
Las reformas incluyen la eliminación de antecedentes penales por posesión y consumo de cannabis.
Sobre el impacto económico, el gobierno de Las Bahamas considera que “al legalizar el cannabis para uso médico, también estamos legalizando muchos insumos de apoyo necesarios para la industria. Hemos abierto la puerta a la creación de miles de puestos de trabajo en agricultura, manufactura, comercio minorista y dispensarios, y atención médica. Esta industria hará una contribución significativa a nuestros esfuerzos por diversificar nuestra economía a través de estos sub-sectores”.
De concretarse la iniciativa, se creará la Autoridad de Cannabis de Las Bahamas, entidad regulatoria que emitirá las licencias para la fabricación, producción, almacenamiento, distribución y venta de la planta y sus derivados.
Destaca que las entidades con licencia para el cultivo y producción, es decir las empresas que toquen la planta, deberán ser 100% nacionales, mientras que las compañías con licencias para pruebas analíticas, fabricación o investigación, deberán ser tener al menos 30% de capital de Las Bahamas.
La lista de condiciones médicas por las que se darán recomendaciones para cannabis medicinal son: náuseas y vómitos inducidos por quimioterapia, dolor crónico, esclerosis múltiple, VIH y SIDA, epilepsia grave intratable, daño al tejido nervioso de la médula espinal, trastorno de estrés postraumático, artritis reumatoide y otros trastornos inflamatorios autoinmunes, autismo y glaucoma. Anemia falciforme, ansiedad, trastornos del sueño, dolor crónico, enfermedad de Alzheimer, enfermedad de Crohn, hepatitis b, síndrome de Dravet, depresión y ALS (también conocida como enfermedad de Lou Gehrig).
El cannabis medicinal será dispensado únicamente por farmacéuticos y profesionales farmacéuticos con educación y formación en la dispensación de cannabis, que serán considerados legalmente profesionales de la salud.
El cannabis será rastreado electrónicamente en cada paso de la cadena de producción.
Para garantizar el uso controlado del cannabis con fines sacramentales, los líderes de grupos religiosos con licencias organizativas solo podrán distribuir cannabis como sacramento a los miembros en un lugar de culto o, alternativamente, para aquellos que no están afiliados a una organización, se podrá otorgar una licencia para su uso en espacios privados.
No se permitirá el uso recreativo ni el uso médico o religioso sin licencia. Además, cualquier posesión de pequeñas cantidades, aunque esté despenalizada, seguirá considerándose ilegal. Las personas que sean encontradas con pequeñas cantidades pueden estar sujetas a una multa de 250 dólares.
Se establecerá un estándar para las concentraciones máximas de THC para diversos productos derivados del cannabis.
En Las Bahamas serán reconocidas las tarjetas de cannabis medicinal de otras jurisdicciones, incluyendo las de 28 estados de Estados Unidos, Canadá y otros países.
El proceso de legalización y descriminalización en Las Bahamas deberá ser aprobado por el Parlamento y se espera que esto ocurra sin contratiemos durante los próximos meses.
Más información: Sitio oficial del Primer Ministro de Las Bahamas
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